La historia corporativa es algo tan natural para las empresas como la narración lo es en cualquier momento de nuestra vida. Siendo un elemento que ayuda a los líderes a comunicar su visión a su comunidad. Haciendo del storytelling corporativo, un básico indispensable.
Es importante empezar desde el principio, porque si no tienes claro qué es el storytelling, difícilmente podrás aplicarlo a la cultura de tu empresa.
NARRACIÓN.
El storytelling es narración; una historia que habla de quiénes somos y cuáles son nuestros valores (en el caso de una marca) o de cuáles son los atributos de nuestro producto. Está presente en todos lados y es algo indispensable para presentarnos ante nuestros grupos de interés o públicos objetivo.
Lo que nos lleva a la importancia de tener un storytelling corporativo, pues con él podremos decidir quiénes somos, además de ser la clave para saber cómo nos presentamos y ser coherentes en nuestro discurso.
Para ello tenemos que tener claro nuestro papel en la historia que contamos, deberemos ser conscientes de quiénes somos y adecuar lo que decimos a este hecho. El mensaje a comunicar debe ser auténtico y formar parte de nuestro ADN, para ello debemos conocer a nuestra audiencia y dirigirnos a ellos en un tono adecuado y evitar utilizar frases largas.
La finalidad de un storytelling corporativo es conseguir que todos los empleados empujen en la misma dirección, creando una cultura de empresa sólida. Aumentar el compromiso tanto de los empleados como de la directiva. Además de aportar una visión clara del tipo de organización que somos, para los nuevos empleados y potenciales partners e inversores.
Finalmente, dejando clara la idea de que, el storytelling corporativo es una herramienta al servicio del marketing empresarial, y no es el “marketing”. Es evidente que éste, es un aliado que tanto marcas como agencias no podemos obviar, si queremos crear conexiones emocionales con nuestros grupos de interés o públicos objetivo.
Las buenas historias han de transmitir y provocar emociones. Percepciones que son recogidas por las personas, y en las que de seguro provocarán una respuesta. Las personas actuarán y conectarán ante una historia, según la fuerza y profundidad de la misma.
¿La historia de tu marca desencadena una emoción? ¿Inspira al usuario a “quedarse” con tu idea? ¿Estás listo para tener tu propio storytelling corporativo?